Salmo 143:8 – Un nuevo día en la misericordia de Dios

La misericordia de Dios es lo primero que necesitamos al comenzar un nuevo día. En Salmo 143:8, el salmista nos enseña a buscar esa misericordia desde la mañana…

📌 Versículo clave:
«Hazme oír por la mañana tu misericordia, porque en ti he confiado; hazme saber el camino por donde ande, porque a ti he elevado mi alma.»
— Salmo 143:8 → Salmo 143:8 en Biblia.com

LA MAÑANA, UNA OPORTUNIDAD PARA ESCUCHAR SU MISERICORDIA

Hay algo especial en el amanecer. Es el momento en que todo parece volver a comenzar. En Salmo 143:8, David clama desde lo profundo de su alma. Está rodeado de enemigos, con el alma abatida, y sin embargo, pide oír la misericordia de Dios al comenzar el día. No está pidiendo justicia, ni venganza, ni explicaciones. Pide misericordia.

🙏 En esta frase hay esperanza para ti y para mí. Porque no importa lo que hayas vivido ayer, hoy es un nuevo día en la misericordia de Dios.

LA CONFIANZA ES CLAVE PARA ESCUCHAR SU VOZ

David dice: “porque en ti he confiado”. La misericordia de Dios no se recibe como un derecho, sino como un regalo que viene a aquellos que confían en Él.
La confianza es la llave que abre el oído del alma para escuchar Su voz por la mañana.

📖 Otros textos que refuerzan este principio:

• “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias; nuevas son cada mañana.” (Lamentaciones 3:22-23)
• “Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían.” (Nahúm 1:7)

EL CAMINO DE DIOS: DIRECCIÓN PARA CADA DÍA

David no sólo quiere consuelo: también quiere dirección. Le dice a Dios: “Hazme saber el camino por donde ande”.
Eso significa que no quiere vivir guiado por sus emociones o problemas. Quiere que cada paso sea una respuesta al plan de Dios.

🧭 En este nuevo día, ¿estás pidiendo a Dios no solo que te consuele, sino que te dirija?

ILUSTRACIÓN:

Imagínate que estás en un bosque denso y oscuro. Todo es confuso. Pero al amanecer, un rayo de luz se cuela entre los árboles, y ves un sendero que no habías notado antes. Eso es la misericordia de Dios cada mañana: ilumina lo que parecía imposible y te da dirección.

Así actúa Dios con sus hijos. Aunque el día anterior haya estado lleno de errores o lágrimas, su misericordia llega al amanecer con nuevas oportunidades.

APLICACIÓN PERSONAL

Cuando abras los ojos por la mañana, antes de mirar el celular, antes de prender la cafetera, repite este versículo en voz alta. Hazlo tu oración.
Que tu primer pensamiento no sea “qué tengo que hacer”, sino “Dios, háblame con tu misericordia”.

En los días de angustia, la misericordia de Dios no solo es consuelo, sino también dirección. Muchos intentan comenzar sus mañanas con motivación humana, pero nada se compara con comenzarla bajo la guía del cielo. Si abrimos nuestros oídos espirituales al amanecer, podremos experimentar una paz que el mundo no puede ofrecer.

LLAMADO

¿Estás cansado de comenzar los días con ansiedad o rutina? Hoy Dios quiere darte una nueva manera de vivir: comenzar cada día escuchando su misericordia.
Él te espera en el silencio de la mañana para renovar tu alma y dirigirte con amor.

RETO

⏰ Durante los próximos 7 días, pon tu despertador 5 minutos antes y ora con Salmo 143:8. Escríbelo en una hoja y pégalo junto a tu cama. Haz del amanecer un altar de renovación.

FRASE DESTACADA PARA IMAGEN:

🖼️ “Cada mañana es una oportunidad para oír la misericordia de Dios.”

ORACIÓN FINAL

Señor, gracias por regalarme un nuevo día. Hoy quiero oír tu voz, sentir tu misericordia y caminar en tu camino. Aunque ayer haya sido difícil, hoy me levanto con esperanza porque tú me sostienes. Dirígeme, háblame y moldéame en tu voluntad. En el nombre de Jesús, amén.

→ Sermón sobre Lamentaciones 3:22-23 – Misericordia nueva cada mañana